Guerra es Guerra


La lucha sigue… en tiempos de guerras económicas, políticas y mediáticas, Venezuela continúa el incansable transitar por los hechos de desestabilización, operaciones ejecutadas por la derecha, más intensas desde la siembra del presidente Chávez; él nos alertó de dichas coyunturas.

Los golpes económicos y mediáticos tributan a la debacle política.

Es necesario entrar en el tiempo de las “acciones”, ya basta del bendito diagnóstico que nunca termina, el pueblo pide a gritos desgarradores que se use el mazo, ya identificamos a: los bachaqueros, revendedores, especuladores, politiqueros, guarimberos… nos falta saber con nombre y apellido, tal y como lo dijo Luis Britto García hace unos días en  el Congreso Internacional Inventar la Democracia del Siglo XXI, lo siguiente:

“Señores estamos en una guerra del capitalismo contra un proceso que intenta ir hacia el socialismo, eso es absolutamente claro, no admite nebulosidades, no admite definiciones y parecería que no acabamos de entender de qué se trata. Recuerden ustedes que Bolívar, en un decreto llamado de guerra a muerte, clarificó de manera absoluta los bandos y desde entonces la contienda, ante esa decisión, ese deslinde de los campos, quedó ganada, por lo menos en lo conceptual y a esa vitoria conceptual siguió la victoria militar al poco tiempo. Hay una cantidad de medidas, que todos sabemos que se deben adoptar, cuando estamos en una guerra mediática y en una guerra económica, como en este caso. Señores el presidente de la República ha denunciado que desaparecieron unos 60mil millones de dólares, con empresas fantasmas, empresas de maletín, importaciones ficticias, etcétera. ¿Cómo es eso?, ¿los dólares desaparecen así como desaparece la leche o desaparece el desodorante?; no, esos dólares fueron entregados por alguien y entregados a alguien; la primera medida en esta guerra psicológica es que el presidente divulgue la lista de todas las empresas… y personas que defraudaron al pueblo venezolano ¡y de los funcionarios implicados! ¿Cómo es eso que estamos en una guerra y no sabemos quién es el enemigo?, ¡ay no! no, no, no, no te vamos a decir quién es el enemigo, que eso no conviene, eso, no, yo los mantengo bajo un manto protector, pa´ que no sepas a quien atizarle un golpe o a quien dispararle…no, no, ¡hay que saber quién es el enemigo!, cuales son, con nombre, apellido, cédula de identidad, cargo, propiedades, toda esa serie de cosas. Si estamos en una guerra; guerra es guerra”

¡Más claro no canta un gallo! Britto García resume en esas palabras la acción inmediata de Maduro, para poder saber al otro monstruo que debemos enfrentar y vencer. Quedaría entonces ejecutar y administrar justicia. De igual manera la Superintendencia de Costos y Precios Justos debe tomar labores de calle, acompañada de unión cívico-militar, sin maltrato, con mucha estrategia y táctica; es imprescindible que los voceros populares no sean censurados en toma de decisiones y se les haga caso a las múltiples denuncias que se hacen cotidianamente, las cuales no pueden ser solventadas por un grupo de personas sin credenciales para actuar. Antes de cerrar el punto económico, es justo mencionar que el Estado tiene imperiosamente que ejecutar políticas para la producción agrícola en masa, llevar las manos a la siembra, hacer convenios internacionales de alto impacto para dar resultados a corto, mediano y largo plazo; colocar al frente a venezolanos competentes en el área agroecológica.  

En el plano mediático, seguirá pasando lo mismo, pero el tema más explotado será la difamación de líderes como Diosdado Cabello, cuestión que no podrá calar mientras el gobierno tome duras medidas sancionatorias contra los verdaderos corruptos como el caso de Rafael Isea y otros. La mejor forma de contrarrestar la campaña de satanización de liderazgos es capturando y enjuiciando a los traidores a la Patria; puesto que engañaron al pueblo, a Chávez y  se aprovecharon de la Revolución.

Para evitar que sigan germinado seudo-líderes “chavistas, rojos rojitos”, es con la conciencia de las bases populares, tomándose en serio las próximas elecciones parlamentarias, llenando la Asamblea Nacional de diputados incisivos, a los cuales no les tiemble el pulso de mandar a la cárcel a un familiar corrupto. Por el lado de la derecha, quedó demostrado ahora más que nunca las profundas divisiones que tienen, se caen a golpes y apuñalan entre ellos mismos. Quedará como reflexión para el PSUV, que se debe activar verdaderamente el Gran Polo Patriótico, sería una hecatombe no tomar en cuenta a los demás partidos de izquierda, los cuales tienen muchísimos aportes en positivo para un nuevo proceso de aplicación de las 3R de Chávez (Revisión, Rectificación y Reimpulso).

La revolución es para hacer uso de la dialéctica colectiva, para disertar, reflexionar profundamente con muchos puntos de vista, en las instituciones, universidades, empresas; eso debe continuarse, pero constituirá la participación convertida en acción, los resultados que saciarán la sed de justicia del pueblo, lo que conllevará a seguir labrando el sendero de la inversión social y calidad de vida. Entendamos tal y como lo expresa Britto García que guerra es guerra y debemos tomar el fusil de la estrategia del conocimiento.

Alí Acosta V.

Porlamar, 28/05/2015

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