A la Batalla del 6-D

Los venezolanos tenemos otro gran reto coyuntural, demostrarle al mundo que nuevamente el amor puede más que el odio. Los ataques al gobierno del pueblo, el Bolivariano, nunca han cesado desde 1999, Golpe de Estado, sabotajes, paros, francotiradores, paramilitares, guarimbas, la mezcla de todo lo anterior… esas acciones parecen nunca acabar y siempre es la agenda de los partidos políticos de derecha, jamás se dignan a ofrecer un plan de país, ni lo harán.

En todos los escenarios el frenesí amoroso se impone ante cualquier intento de destruir. Han sido varias batallas que hemos ganado y perdido; hay gobernadores, alcaldes, concejales y diputados tanto de derecha como del chavismo, todos elegidos a través de proceso dirigido por el Consejo Nacional Electoral, ese mismo organismo al cual califican de fraudulento, ¡claro, solo hay fraude cuando pierden los escuálidos!, si la derrota es chavista dicen en vez de, ¡maldita Tibisay!: ¡Esa es mi rectora carajo! Sin dejar de mencionar que cada organización política cuenta con informáticos y testigos electorales que garantizan la transparencia antes-durante-después de cada elección. Esperemos que este 6-D nadie mande a “descargar la arrechera”.

Estos últimos tres años para la Patria, podemos considerarlos “tiempos de bombardeo incesante”, perdimos físicamente al Comandante Chávez, nos siguen asesinando a líderes revolucionarios, caen las caretas de los traidores, aumentan las presiones internacionales, los medios de desinformación crean la pandemia de disociación psicótica y pare usted de contar.

Los tres grandes males que el pueblo exige sean solventados son: seguridad, precios y corrupción. Se vienen atacando y dando resultados con la Operación Liberación y protección del Pueblo (OLP) cubriendo las expectativas y hasta haciendo ladrar mucho a la derecha, la intervención absoluta de las fronteras constituye una acción al tino, con la cual se frena el desangramiento económico, aparte de descubrir varias irregularidades (prostitución, paramilitarismo, parapolítica, desplazamiento migratorio excesivo, ataque a la moneda nacional…). Faltaría arreciar y mejorar los sistemas de fiscalización a todo la red de producción, distribución, comercialización de productos, bienes, servicios, con el objetivo de aliviar los gastos familiares que se ven groseramente inflados por el sobreprecio, especulación y acaparamiento; en estos últimos días del 2015, se tiene que llamar al pueblo-gobierno a salir a fiscalizar para garantizar una feliz navidad. Por otra parte la gente quiere ver tras las rejas a los saqueadores de las riquezas venezolanas, siendo la mayor demostración de patriotismo, haciendo caer el imperio de la ley sobre los corruptos.

La derecha está calada y herida por tantas derrotas, cuestión que los convierte en factores poderosamente peligrosos, sumándole las pretensiones imperiales al tenernos rodeados militarmente (Aruba, Curazao, Bonaire, Guyana y Colombia), valedero mencionar la violación reciente de nuestro espacio aéreo por parte de la inteligencia gringa. Debemos estar atentos, pues la derecha nacional y foránea al verse infinitamente derrotada, no le quedará más opción que la violencia en su máxima expresión.

El chavismo pese a las arremetidas, continúa trabajando por construir un mejor país y para esta gran batalla del 6-D nuestra lucha en unidad suprema debe prevalecer para defendernos “COMO SEA”.

¡Defendamos los logros de la Revolución Bolivariana!

Alí Acosta V.

Porlamar, 10/11/2015